¿Qué hacer ante una parálisis de sueño y no morir en el intento?

Las parálisis de sueño y los demonios

Estás acostado o acostada durmiendo y de repente sientes que una fuerza extraña te despierta pero que no te deja hablar, o como si un espíritu estuviera rondando por encima de tu cuerpo viéndote dormir, haciéndote sufrir esperando para arrebatar tu vida.

Además, por más que quisieras pedir ayuda simplemente no lo puedes hacer porque hay algún poder mágico que sella tus labios y tu voz. De hecho ni siquiera puedes abrir bien los ojos y muchas veces es casi imposible moverse ante un "ataque" de este tipo. Pues bien, eso es una parálisis de sueño, aunque suena más terrorífica de lo que verdaderamente es.

La parálisis de sueño es también conocida cono Síndrome de la Bruja vieja (Old Hag Syndrome), y en algunos casos se piensa que se trata de algún espíritu o demonio relacionado con tus más profundos deseos carnales que quiere jugarte una mala pasada.

En el caso de los hombres heterosexuales, se dice que las parálisis de sueño son causadas por culpa de algún súcubo, y en el caso de las mujeres heterosexuales se cree que es por obra y gracia de algún íncubo. Quizá las parálisis de sueño estén relacionadas con la falta de tener relaciones sexuales por mucho tiempo.

¿Qué hacer para evitar morir ante una parálisis de sueño?


Lo que te voy a recomendar aquí lo digo por experiencia propia, porque desde los 15 años me suceden estas parálisis de sueño, y a la fecha (diciembre de 2017), con 28 años, todavía me siguen sucediendo, aunque ya me acostumbré a ellas, y de hecho cada vez que me suceden siento que puedo moverme más y que puedo abrir más los ojos. Es casi como si yo quisiera desafiar estos molestos episodios y en algún momento lograr despertarme durante el ataque de un súcubo a ver qué tan atractiva es.

1. No te vas a morir por culpa de una parálisis de sueño. Tal vez se te dificulta respirar, pero lo mejore es estar en estado de alerta y lucha constante para que la adrenalina te mantenga a tope.

Además cuando intento luchar más, estos episodios de parálisis suelen durar menos tiempo (no más de 20 segundos). En cuanto al riesgo de morir, quizá solo sea probable si tienes problemas cardíacos, sobre peso graso y problemas de tensión arterial, y en sí es esto lo que podría ocasionar que puedas perder la vida durante la visita de un súcubo, un íncubo o en algún otro momento de tu vida. Así que mejora tus hábitos de vida, pero hazlo ya.

2. Que no te dé miedo. Esto es algo normal. Aunque debo aceptar que las primeras veces que experimenté esto, siempre despertaba y abría mis ojos cagado del miedo.

Bueno, no cagado como tal pero si demasiado tembloroso, y sentía que había algún espíritu rondando, y me era casi imposible quedarme dormido sin mantener el tv encendido con un volumen leve. Ya con el tiempo después de decenas de parálisis de sueño experimentadas, uno le pierde el miedo.

Se trata de un episodio que puede ocurrir apenas te acuestas a dormir, durante la noche y/o cuando te piensas despertar, y se caracteriza porque tus sentidos táctiles y auditivos están firmes pero eres incapaz de hablar y de ver (bueno, en mi caso si que he podido abrir bastante los ojos y puedo decirte que no me he encontrado con ningún súcubo aun).

3. Lucha como si tu vida dependiera de ello. Ya sabes que no te vas a morir, así que vuélvelo como algún tipo de juego o competencia.

Es como si estuvieras luchando contra esta supuesta fuerza espiritual o demoníaca, como si la estuvieras desafiando esperando cuándo va a ser la batalla que por fin ganarás, o sea el momento en que puedas despertarte durante la parálisis de sueño o al menos gritar.

4. Evita dormir boca arriba y mejor duerme de lado. Lo más chistoso es que a mi a veces me han llegado a suceder dos parálisis de sueño casi que consecutivas, por supuesto en una misma noche.

Esto sucedía casi siempre porque permanecía boca arriba intentando volver a quedarme nuevamente dormido. Lo que aprendí es que luego de una parálisis de sueño, debes intentar quedarte dormido(a) acostándote de lado. De hecho el dormir de lado es una clave para evitarlas, al menos la mayoría de las veces.

Por razones que realmente no logro entender, a mi y a un amigo muy cercano nos dan parálisis de sueño siempre que dormimos boca arriba. Él me cuenta que a veces ha podido emitir gemidos y que despierta a su esposa. Yo en mi caso aun no he podido llegar a este ese nivel de emitir sonidos y lo máximo es que he podido abrir considerablemente los ojos para cerciorarme de que no haya algún fantasma o que no exista una súcubo que me esté violando.

Los íncubos y su relación con la parálisis de sueño


5. ¿Duermes de lado y aun te dan parálisis de sueño? A mi también me pasa, pero muy rara vez. Al mes me suelen dar entre 5 y 8 parálisis de sueño. Más en los meses donde tengo mucha carga laboral, académica y donde quizá no tengo una pareja estable con quien pueda tener relaciones íntimas cuando quiera.

Así que quizá la teoría de que las parálisis de sueño se pueden dar por la falta de sexo puedan ser ciertas. Aunque mi amigo tiene esposa, y se supone que deben revolcarse como conejos. Entonces quizá las parálisis también estén arraigadas a la ansiedad, angustia, estrés.

6. Sé feliz. Es extraño, pero no ha todo el mundo le pasa. No todos han tenido episodios de parálisis de sueño en sus vidas. Ya le he preguntado a varias personas de distintas edades y son muy pocas las que experimentan estos "ataques demoníacos".

Y las pocas que lo han experimentado dicen haberlo hecho hace mucho tiempo y que suele suceder muy pocas veces al año... como las envidio, a mi me pasa casi que una o dos veces a la semana... creo que debo empezar a preocuparme por ser más feliz sin dejar de escribir en mis blogs, claro está.

Casualmente a las personas a quienes nunca les ha tocado experimentar una molesta parálisis de sueño, son personas a quienes no se les nota el estrés por ningún lado y que además suelen tener muchos amigos y una pareja estable, y que no suelen preocuparse por los problemas que este mundo industrializado y capitalistas nos quiere embutir.